¡Aumenta la productividad y mejora la experiencia del cliente!
Puntos de venta desatendidos con diferentes formas de pago (con tarjeta de crédito, efectivo o ambas). Trabajan de forma autónoma e ininterrumpidamente, aumentan la rentabilidad del negocio, evitan colas y tiempos de espera y mejoran la distribución del personal.